LOS MÁNDALAS:
Consisten básicamente en una forma circular con formas geométricas centradas, organizadas en diversos niveles visuales. Las formas básicas más utilizadas son círculos, triángulos, cuadrados y rectángulos.
Desde el punto de vista
espiritual es un centro energético de equilibrio y purificación que ayuda a
transformar el entorno y la mente de quien medita en ellos.
Los monjes tibetanos budistas
realizan los mándalas con arena de colores, estos mándala de
arena suele realizarse bajo la petición de una comunidad para traer la paz al
mundo y, por otro lado, sirven como herramienta de "meditación".
monjes budistas realizando un mándala con arena de color. |
Para la realización los monjes
verterán millones de granos de arena (procedentes de piedras semipreciosas)
durante un periodo que puede llegar a durar varias semanas. Para ello
utilizan unos embudos tradicionales de metal denominados chak-pur: éstos poseen
la superficie rallada y al ser frotada crea unas vibraciones que hacen fluir la
arena como un líquido. La arena va cayendo finamente y se va expandiendo desde
el centro hacia las orillas, simbolizando el nacimiento.
Los mándalas son útiles para la concentración, la
activación de la energía positiva, para la energizar lugares, meditación
profunda para elevar el nivel de conciencia, expandir la capacidad de la mente
y la memoria.
Crear mándalas y meditar en ellos es un poderoso
instrumento que potencia la creatividad, expande la conciencia y nos reconecta
con nuestro Ser. Además nos ayuda a mejorar la comunicación con el mundo y nos
permite desarrollar la auto-aceptación y la auto-observación de una manera
natural e intuitiva. Nos centra, nos armoniza, nos hace sentir paz y
bienestar.
*CREAR UN MANDALA:
Si nosotros queremos crear un mándala, debemos tener en cuenta su esquema básico: un círculo y cuatro puntos cardinales.
Obviamente esta no es una regla estricta que no se pueda romper, también puede ser que en lugar de que su base sea un círculo puede ser un triángulo, un cuadrado, o un octágono.
Obviamente esta no es una regla estricta que no se pueda romper, también puede ser que en lugar de que su base sea un círculo puede ser un triángulo, un cuadrado, o un octágono.
A partir de ahí podemos diseñar nuestro mándala y esto ¡es cuestión de
creatividad! puedes decorarlo con imágenes místicas como el símbolo del
ying-yang, una cruz, la estrella de David, lunas, estrellas, el sol, flores,
aves, paisajes, nubes, figuras geométricas… en fin, busca los diseños que te
proyecten paz y tranquilidad.
*COMO PINTARLOS:
Busca un lugar tranquilo, y observa detenidamente tu mándala, concéntrate en el, si después de observarlo por un largo rato notas que se mueve, es la energía que está en movimiento.
*COMO PINTARLOS:
Busca un lugar tranquilo, y observa detenidamente tu mándala, concéntrate en el, si después de observarlo por un largo rato notas que se mueve, es la energía que está en movimiento.
Es conveniente empezar a pintarlo de afuera hacia
adentro, esto nos representa el autoconocimiento de lo externo hacia nuestro
centro, hacia nuestro interior.
Decide la dirección en vas a pintarlo y trata de
mantenerla.
Al elegir los colores puedes hacerlo de manera
intuitiva, no importa que no combinen, de esta manera podrá descifrar tu estado
de ánimo. También podrás hacerlo eligiendo los colores y trata de cambiar tu
estado de ánimo de ésta manera.
Tal vez te de sueño en el proceso, si estabas tenso,
el mándala está cumpliendo con la relajación, es normal, en este caso es
preferible dejarlo y disponte a dormir.
Si no terminaste el mándala en ese momento, déjalo
así, la próxima vez que quieras pintar uno, elige uno nuevo, con colores que
vayan más acorde con tu estado de ánimo en ese momento.